lunes, 3 de agosto de 2020

La tierra que nos separa


La tierra que nos separa

Poemario de Nallely Guadalupe Tello Méndez

                                                                   Leído julio 2020 a cuatro meses de encierro

Hay muchas formas de escribir poesía, y existen diferentes tipos de poesía, ya ni que decir sobre los temas. Podemos escribir del amor, la vida, la ciudad, un conflicto, un canto, lo que sea, todo es susceptible a ser escrito. 

Una poesía que ha sido poco difundida es la que se suscita de la escritura de las mujeres, en particular aquella que muchas veces forma parte de una escritura autobiográfica, es decir, proviene de la experiencia de la vida interna, familiar, social y alguna representa la voz política como la de Alaide Foppa. 

Esta escritura autobiográfica que se traslada a poemas, ficciones, crónicas, y muchas otras formas han dado cuenta de la otra cara en la literatura y de la importancia como lo diría Sara Sefchovich sobre como narrar desde la óptica femenina femenino,  es construir ese otro lenguaje que habitamos y nos habita, pero que no ha sido tan público, por trivial, irrelevante o casero; sin embargo es parte importante de la misma cotidianidad donde se vuelve relevante y donde se gestan las revoluciones. 

En este sentido quisiera compartir esta lectura de Nallely Tello como una impulsora de la poesía y voz de las mujeres y como poeta a través de su poesía autobiográfica, no por ser la primera en la primera en escribir, sino por ser precursora a ser leída, difundida en el espacio público donde se torna la construcción del lenguaje desde lo femenino plasmado en la poesía. 

Su poesía está clavada en la tierra como origen, un lugar para estar, también es residencia y camino, la poesía de Tello nombra los afectos, los analiza, los teje y suelta. Pone en relevancia ese vínculo importante que todas y todos tuvimos o tenemos, esa memoria, de esa persona que siempre eterno nos acompaña sobre la tierra, y debajo de ésta. 
                                               

Esta poesía que no surge del quehacer del aula, sino de la tierra misma, del origen que se tiene, de los cambios que se transitan, de las lecturas que se habitaron con tiempo. Es la tierra, así como lo expresa la autora, el lugar idóneo para tener lenguaje y nombrar el entorno. Ella lo sabe y dibuja lentamente con sus pies y manos en cada poema que escribe, donde nace esa exploración con las letras, pequeños paisajes, que se reflejan en este entrecruce del poemario. 

La tierra que nos separa es una melodía de lo vivido, el sonar de las palabras están ahí, y sólo falta dejarse llevar por esos diferentes cantos, la voz se construye y se madura sobre esa tierra que ella transita y valientemente explora. 

Puedes conseguirlo en la https://www.librespaciolajicara.com/ que tiene servicio a domicilio, por si no quieres salir. 



martes, 21 de julio de 2020

10 razones para leer a escritoras gestantes y madres desde la escritura autobiografía


Leídos entre mayo y junio 2020
Haydee Ramos 


Descubrí el placer de la escritura autobiográfica por primera vez con los Diarios de Anais Nin, después viajé a los de Virginia Woolf,  Silvia Pla y luego a la escritura  autobiográfica de Rosa Nissán y otras tantas novelas escritas por mujeres, pero la escritura que pertenece a las madres y se sitúa espacialmente en esta experiencia me ha dejado sin aliento varios meses,  por estas razones. 


1. Las madres se vuelven visibles, en sus procesos maternales y creativos, se apropian de este otro espacio  intelectual con ello. 



2. Se rompe el mito de que las madres no pueden ser escritoras. 


3. Se rompe el tabú sobre las ideas construidas de la maternidad desde la óptica de los escritores y los varones, la madre enaltecida que tanto anunció Rosario Castellanos. 


4. Se rompen los silencios entre las mujeres acerca de sus sensaciones y experiencias maternales pasadas y en la vivencia de su maternidad actual. 


5. Leer autobiografías desde la perspectiva de la madre abre un mundo de entendimiento de las crónicas familiares y los procesos de identidad. 


6. Es necesario crear estos espacios de escritura y lectura desde la voz y acción de las mujeres madres para entender que este sistema no ha pensado en nosotras, ni en la primera infancia.

7. El status quo literario nos ha enseñado que la escritura autobiográfica es menos interesante porque no se ficciona. 


8. Descanonizar la escritura de las mujeres madres como romántica e ideal. 

9. Cuestionar al sistema patriarcal que nos orilla a ejercer crianzas desiguales. 


10. Pedir y hacer uso  de los derechos maternales y paternales. 



Algunos libros con los que puedes empezar: 



                Linea nigra eBook: Barrera, Jazmina: Amazon.com.mx: Tienda Kindle                                    Lopditipad: El nudo materno libro .pdf Jane Lazarre    



40 semanas - Glòria Vives | Cronica, Amor romantico, EmbarazoMamá desobediente



lunes, 20 de julio de 2020

Un soplo de vida

Sin palabras, sólo silencio
haré todo aquello que no me atrevo
las cobardías serán desterradas de mi escritorio,
llevaré tu memoria lejos
tengo una deuda de honor.
Sólo a ti 
te debo esas letras,
a nadie podría serle tan claro
todo lo que un soplo significa
en lo que se piensa.
Andar en los vagones correr
de un lado a otro,
a veces pérdida 
y otra veces muerta,
con el silencio a la espalda
con el respiro puesto en las manos
 seguro encontraría algo. 

Y heme aquí a tu lado otra vez. 

Haydee Ramos 


Leído marzo 2020



Este libro, de obra póstuma de Clarice, es una joya oscura que arroja luz, entre sus líneas la misma búsqueda del oficio de la autora a través de un personaje que se encarna y que sobrevive a la autora misma. 


Ángela, un personaje que siente habla y se ve a ella misma, en una oscura dicotomía de los que no es, se pregunta, quién es más importante la obra o la autora misma, o ambas se enfrentan a lo efímero, la muerte y la transmutación, la voz  o el silencio. Ambas viven, se atreven de diferente manera y se incitan a encontrarse para no lograrlo. Una  obra en una voz que se vuelven dos, para volver a una, y al final sólo se quedará el escenario de lo que es un personaje. Otra yo, en otro mundo que vive y respira cada que el libro se abre. 


Clarice escribió esta obra en vísperas de su muerte, como ella lo dijo: este libro fue escrito en agonía, todo lo que ello implica, lo leerás en esa oscuridad que arroja la claridad sobre la efímera existencia. Este soplo de vida que nos antecede a todas y de cuyo rastro sólo queda nuestra historia, quizás en manos de alguien o de algún otra mujer. 




El fuego de los framboyanes


La escritura autobiográfica es uno de los géneros en manos de las mujeres, 
su selección, teorización y recuperación 
aún es un ámbito muy poco estudiado y leído. 
Yo nací mujer,
 y a mis casi 40 apenas conceptualizo
lo que esto implica  en una cultura, 
donde me he tenido que abrir paso por ser mujer. 

Haydee Ramos 


Libro leído en diciembre 2019

Es una recopilación de escritos por mujeres, participantes del proyecto Mujer: Escribir cambia tu vida 2013. 

Los talleres se impartieron en diferentes lugares de Cuernavaca, Morelos. El programa estuvo bajo la metodología de Ethel Krauze, que impartieron diferentes talleristas. 


Es una recopilación de textos con fragmentos de escritura autobiográfica, algunos textos más metafóricos que otros,  pero todos llevan a la reflexión sobre aspectos importantes en sus vidas, las experiencias derivadas de la identidad  de género y en experiencias de violencia que sólo las mujeres entienden por ser socialmente mujeres. 

Textos cuidados en su edición, reconstruidos,  valientemente sentidos en primera persona, donde las primeras voces se asoman asombradas de escucharse así misma, es un aporte de esta antología, que una pueda leer con esa frescura la reconstrucción de una historia por primera vez contada.

Si andas por una librería Educal, ahí lo puedes conseguir.










Pájaros en la boca
Samanta Scheweblin 

#cuento #cuentistasmujeres #escritoras


Es una dicotomía tener pájaros
negros, blancos, azules, 
grandes, pequeños. 
sonoros o callados, 
salen en parvada, 
o en solitario, 
algunos dan más miedo que otros
cuando asoman las alas y el tipo de canto. 

Los pájaros salen desdentados 
cuando son libres
libres de llanto 
y músculos apretados, 
las caras pálidas
se abren
la boca se ensancha
los ojos brillan 
están dispuestos a irse 
cuando dejamos de apresarlos.

Haydee Ramos 
Libro leído en febrero 2020 


Es una compilación de cuentos publicado por editorial Almadía,  al inicio me costó agarrarle el hilo que conectaba un texto con el otro y entender el porqué se habían compilado bajo ese título. Después de la primera mitad del libro el sentido llegó por sí mismo, el silencio como un primer actor entre todos los personajes, el silencio como un tema entre las comunidades. 


Los sin sentido del silencio en las acciones de cada personaje y los silencios provocados de las escenas, y los silencios que es mejor guardar para no revelar toda la trama de la historia de golpe, y dejar a la lectura sea revelada al final, ¿qué sucedió aquí? Entonces tenemos que volver a la página y releemos para encontrar en las letras las metáforas que significan ese silencio en el cuento.


Es un libro para leerse con calma y delicadamente, con la disposición de volver a la página y repensar la lectura, un libro que te llenará de silencio, y te pondrá de frente a tus propios silencios. 



sábado, 8 de febrero de 2020

La flor púpura

Recomendación del libro La flor púrpura 
  • “Los ojos de la lectura no son impersonales, es la escritora y la lectura juntas que construyen todo lo que podría significar el texto”. Haydee Ramos 
La flor púrpura 
Chimamanda Ngozi Adichie

#novela
#Escritoras
#Africanas 
#Migrantes 
        

Uno recuerda a través de las letras de La flor púrpura, el tiempo, las personas, la casa en la que vivió. Los días de adolescencia y niñez, parece que sucedieron ayer, inmediatamente es inevitable oler la sensación de ese momento en las páginas. 

La flor púrpura cuenta esa historia de cuando se florece en la casa como en un campo de flores o si se florece en un lugar minado. Y relata la historia de  un adulto que nunca floreció, y no deja que florezcan los demás, un adulto triste que fue invadido por la religión, el trabajo y el poder comienza letalmente a prohibir el ser de los otros. 

Eso describe Chimamanda con una sutil delicadeza sus personajes, y nos lleva a mirarlos, a entenderlos desde ese actuar y juzgarlos menos (un breve beneficio de la lectura). 


Todo cae poco a poco entre el tejido de una casa donde no se puede reír, un lugar donde no se puede amar a quienes salgan de esta norma, todos perderán su tranquilidad, y la violencia patriarcal será el cinturón del comportamiento. 

Entonces la timidez en los personajes crece, los anhelos, los sueños, el amor y todo aquello que no puede cumplirse se marchita, o se lucha ferozmente por lograrlo, o se defiende a sangre para protegerse. Esos serán los caminos que se verán obligados a elegir estos personajes. 

En la novela todo se dibuja dentro de esa casa, una figura de un adulto, que se vuelve tan grande, que no deja espacio para respirar a los demás, ni siquiera en el silencio.



¡Qué terrible vivir en el silencio, en el autoimpuesto y el perpetrado! Los personajes congelados se callan, necesitan alejarse de toda realidad porque no pueden, porque no saben vivir, porque no pueden expresarse porque algo adentro se murió. 

El ejercicio de esa violencia tiene la marca más dura, perpetrarse en el silencio de la existencia propia, donde es imposible escuchar la propia voz. Sin embargo, la escritora aunque nos lleva por el llano más seco, encuentra una esperanza: quién quiera reír, reirá y florecerá, aún en la más rara y bella especie.

La flor púrpura es un mapa de los caminos que subyacen a la violencia patriarcal, el cariño contra la política cultural imperante en toda una época. Aún así la risa se escuchará entre las casas y las calles llenas de pobreza y tradición de la región, las costumbres no conquistadas ni impuestas como el cristianismo. La calidez de la tierra africana te consternará y emocionará en la historia. 



domingo, 22 de septiembre de 2019

De ballenas

Del libro Una ballena es un país de Isabel Zapata, aprecié el movimiento de los animales, las citas contextuales. Y los dos poemas que me gustaron son ballenas y caracoles, dos mundos distantes en  tamaño y existencia en este mundo.

La voz de las ballenas

Las imaginé viviendo tan en el fondo del mar, de un universo
desconocido, apenas sus voces son eco y refugio de los mares,
una sinfonía enlazada que imagine escuchar en medio del océano.



De los caracoles  escucharé las Razones para no pisar un caracol 🐌 e intentaré
Caminar con el estómago y amar su rigidez.